Diferencias entre taladro y destornillador

Por Davide - Categorías : Herramientas eléctricas Rss feed
La respuesta es muy sencilla al principio. El taladro tiene la capacidad de perforar materiales más o menos duros, mientras que el destornillador sirve para atornillar o desatornillar tornillos, pasadores, tuercas y pernos. Este es el punto de partida.

Pero está claro que la diferencia entre un taladro y un destornillador va mucho más allá, ya que estas herramientas, evolucionando en niveles diferentes, son capaces de obtener resultados diferentes y en algunos casos superpuestos.

Pueden realizar tareas similares pero esto no significa que puedan renunciar a ciertas características. A continuación, presentamos una breve descripción de qué son estas herramientas eléctricas, cómo utilizarlas y cuándo es mejor trabajar con una u otra. O puedes decidir utilizar uno de los dos indistintamente.

1. Uso y características del taladro

Perforar

Un taladro es una herramienta inalámbrica o con cable que le permite insertar una broca roscada en un mandril. Una vez apretada, esta broca puede realizar su trabajo, que puede ser taladrar, avellanar, tornear o fresar. Mucho depende de la forma que elijas.

Algunas brocas permiten transformar el taladro en una fresadora o un torno, aunque no exactamente con las prestaciones de una herramienta específica. Sin embargo, en la mayoría de los casos la diferencia entre un taladro y un destornillador es que el taladro está dedicado al trabajo de perforación. Así podrás hacer agujeros en hormigón, metal, madera.

Lo más importante es que puedes hacerlo con precisión y profesionalismo. Si necesita perforar madera sin rebabas, es necesario utilizar un taladro que pueda alcanzar ciertos parámetros en términos de velocidad y estabilidad del trabajo. Con la broca adecuada y un taladro lo suficientemente potente, quizás un taladro percutor, puedes perforar prácticamente cualquier cosa.

El taladro se distingue por estar equipado con un mandril en el que se insertan y fijan las brocas. A veces los taladros vienen con un mango adicional y un tope de profundidad.

En un taladro normalmente tienes la posibilidad de ajustar el número máximo de revoluciones y tienes la posibilidad durante la fase de trabajo de acelerar o ralentizar la velocidad del husillo hasta la velocidad máxima.

Además, el taladro suele estar equipado con un mecanismo de percusión. La percusión es un mecanismo que mueve la punta hacia adelante y hacia atrás, golpeando y aplastando el material más duro. Se mide en golpes por minuto. Los modelos potentes pueden superar los 50.000 golpes por minuto, pero para trabajos ocasionales es suficiente un modelo con unos 20.000 golpes por minuto. Para entender cómo funcionan los taladros percutores, imagina que alguien golpea la parte trasera del taladro mientras estás taladrando; por eso, un taladro percutor puede sentirse como tener un martillo neumático en las manos. Algunos taladros inalámbricos son taladros de percusión, que tienen una velocidad de percusión menor que los taladros con cable.

2. ¿Para qué se utiliza un destornillador?

Destornillador

Su finalidad principal es girar un inserto para comunicar un movimiento rotatorio en sentido horario y antihorario que se utiliza, precisamente, para atornillar o desatornillar. Generalmente permite el uso de insertos en forma de destornillador Phillips y plano, pero también hexagonales y de tubo para trabajar sobre pernos y pasadores.

Una de las principales características que lo diferencian del taladro es el par de apriete. El par de apriete es la fuerza que el destornillador es capaz de aplicar al giro, generalmente mucho mayor que la de un taladro que no necesita aplicar mucha fuerza en el movimiento rotatorio. El par de apriete se mide en Newton metros (Nm). Cuanto mayor sea este valor, más capaz será el dispositivo de atornillar tornillos en materiales muy duros o de apretar o aflojar pernos grandes.

Para obtener un mayor par de apriete, los destornilladores suelen estar equipados con un mecanismo de impacto. A diferencia del mecanismo de martillo de los taladros, que golpea perpendicularmente al agujero, el mecanismo de impulso golpea en la dirección de rotación y, por tanto, aumenta su fuerza.

El destornillador no tiene mandril sino una conexión que sólo puede ser hexagonal, para insertos de tornillos, o cuadrada para llaves de tubo.

El destornillador también tiene una función reversible. La reversibilidad permite que el inserto gire en ambas direcciones, simplemente moviendo la palanca adecuada. Esta función le permite atornillar y desatornillar.

La principal ventaja de un destornillador eléctrico es su facilidad de uso, ya que permite trabajar con una gran cantidad de tornillos en un tiempo mínimo. Si tu trabajo es muy largo puedes acelerar sustancialmente el trabajo.

3. El taladro atornillador es el camino intermedio

Taladro atornillador

El taladro atornillador puede realizar tanto trabajos de taladrado como de atornillado y desatornillado. Se trata de una herramienta eléctrica a medio camino entre un taladro y un destornillador, tanto desde el punto de vista estético como funcional.

Estos modelos disponen de regulador de velocidad y en algunos casos también la posibilidad de conmutar a percusión para perforar materiales de construcción.

Además, al menos los modelos más avanzados cuentan con un regulador de par, perfecto para apretar un tornillo como lo haría una llave dinamométrica, y un botón de reversibilidad que permite variar el sentido de giro para poder atornillar y desatornillar.

El taladro atornillador tiene más torque que un taladro pero no tanto como un destornillador ya que no tienen mecanismo de impacto.

4. ¿Cuál elegir?

No hay una respuesta cierta y definitiva.

El taladro es siempre la herramienta ideal para perforar cualquier superficie que podamos encontrar en la vida cotidiana. Sin embargo, es mejor elegir uno con movimiento de percusión para tener mayor posibilidad de intervención.

El destornillador puede parecer una herramienta innecesaria si estás acostumbrado a atornillar y desatornillar con herramientas manuales, pero después de probarlo te das cuenta de que puede ser realmente práctico especialmente si te dedicas a menudo a trabajos de montaje y desmontaje.

Una buena herramienta que pueda taladrar y atornillar puede ser útil para evitar tener que cambiar de herramientas constantemente. Pero está claro que si hay que intervenir sobre materiales muy duros, un gran número de veces en poco tiempo, tener a disposición herramientas específicas y por tanto brocas diseñadas sólo para taladrar marca la diferencia.

Lo mismo ocurre con los destornilladores. Para cada trabajo hay una herramienta correspondiente. La única solución para dormir tranquilo es disponer de un taller bien equipado con la herramienta adecuada para cada ocasión.

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